En el corazón de Euskal Herria se encuentra el pueblo de Idiazabal. Aquí, gracias a pastores, queseros y profesionales del sector, nace un tesoro culinario: el queso Idiazabal. Este producto natural, elaborado con leche cruda de ovejas Latxa y Carranzana, es un verdadero homenaje a la tradición y al buen gusto.

Origen y procedencia

El queso Idiazabal debe su nombre al propio pueblo de Idiazabal, situado en la comarca del Goierri. Su historia se remonta a miles de años atrás, cuando nuestros antepasados ya sabían apreciar la riqueza de la leche de oveja. Hoy en día, este queso curado se produce con esmero, con una maduración mínima de 2 meses. Las ovejas Latxa y Carranzana, pequeñas y rústicas, pastan casi todos los días del año, ofreciendo una leche limitada pero de calidad excepcional.

Sabor y textura

El queso Idiazabal se presenta en dos versiones: ahumado y sin ahumar. Siguiendo la tradición de los diferentes valles, su sabor es penetrante, con notas de leche madurada, cuajo y humo. Al paladar, es simplemente exquisito. Su pasta prensada, con un peso que oscila entre 1 y 3 kilos, es un testimonio de la artesanía que se ha mantenido inalterable durante más de 8.000 años.

Declarado Patrimonio Gastronómico Europeo

La Unión Europea reconoce la importancia del queso Idiazabal al declararlo Patrimonio Gastronómico Europeo. Es un honor bien merecido para un producto que trasciende las fronteras y conquista los corazones de los amantes del buen comer.

El Queso Idiazabal en la gastronomía vasca

En la cocina vasca, el queso Idiazabal es un ingrediente estrella. Se despliega en platos tradicionales como la tarta de queso Idiazabal, donde su sabor se funde con la dulzura de la miel y la textura crujiente de la masa. También lo encontramos en pintxos, acompañando a la txistorra o al membrillo. Y, por supuesto, no podemos olvidar el clásico maridaje con un buen vino tinto, como si estuviéramos en una escena de cine.

Imagina a un actor legendario, sentado en una terraza con vistas al mar en San Sebastián. El sol acaricia su rostro mientras sostiene una copa de vino. Frente a él, una tabla de quesos, y en el centro, el queso Idiazabal. Con una sonrisa enigmática, saborea un trozo y dice: “Este queso es como una buena película: tiene matices, sorpresas y un final memorable”. ¿Quién podría resistirse a tal invitación?

Visita al Centro de Interpretación del Queso

Si quieres sumergirte en el mundo del queso Idiazabal, te invitamos a visitar el Centro de Interpretación del Queso en Idiazabal. Allí descubrirás los secretos de su elaboración, conocerás de cerca la vida de los pastores y podrás presenciar el proceso artesanal en una quesería. ¡Una experiencia digna de un guión cinematográfico!

En resumen, el queso Idiazabal es más que un manjar: es una historia que se despliega en cada bocado. Así que, querido lector, la próxima vez que degustes este queso, imagina que estás en una escena de película, y disfruta de su sabor milenario que trasciende el tiempo.

¡Bon appétit! Y si alguna vez te encuentras en San Sebastián, no olvides visitar el Zinema7 Hotel, donde el queso Idiazabal podría ser la estrella de tu propia película culinaria.